Tu piel me visitó esta noche de desengaños
Se le adelantó al ladrón
Que venía a entrar a saco
Mi casa, mi suerte
Llegó de tarde
Por la noche de pasos de reloj
Y cigarras canoras
Tu piel se coló Por debajo de la cama
A través de la ventana
Saltando sillones Abriendo libros
Me visitó con dientes blancos
Y fieros
Con marcas de mordidas
Y perfumes suaves
Vino tropezándose con la tubería que está tendida en el techo
Llamando a los cristales
Metiéndose entre mis sábanas
Tu piel llegó de pronto
Inesperada y bienvenida
Sin invitaciones Sin reservación Ni cita previa
Y yo no estuve allí para esperarla.
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