Imágenes barcelonesas (I)
Voy caminando por la calle. Diez metros delante de mí, mientras espera la luz verde para pasar la calle, una mujer de veintitantos se dobla en ángulo recto para dejar las bolsas con la compra en el suelo.
Junto a mí, otra mujer, de cincuenta y muchos, rezonga y protesta por lo bajo. No es para más: la joven lleva una minifalda tan breve que, cuando vuelve a enderezarse, no le llega ni a la mitad de los muslos.
¿De qué color eran las bragas? No sé. No pude ver tela alguna.
Voy caminando por la calle. Diez metros delante de mí, mientras espera la luz verde para pasar la calle, una mujer de veintitantos se dobla en ángulo recto para dejar las bolsas con la compra en el suelo.
Junto a mí, otra mujer, de cincuenta y muchos, rezonga y protesta por lo bajo. No es para más: la joven lleva una minifalda tan breve que, cuando vuelve a enderezarse, no le llega ni a la mitad de los muslos.
¿De qué color eran las bragas? No sé. No pude ver tela alguna.
Ahora, que lo recuerdo, aún sonrío.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario